ACEITEMOS LOS FUSILES Y SIGAMOS TRABAJANDO

El pasado 6 de diciembre del 2015 las fuerzas revolucionarias de Venezuela, sufrieron una derrota electoral que no permitió mantener la mayoría en la Asamblea Nacional de la Republica. Debido a las constantes campañas psicológicas que la derecha empleo en la población, prometiendo acabar con el problema económico, fue que obtuvieron su victoria, como lo acoto el presidente Nicolas Maduro “esta fue una victoria de la guerra económica contra el pueblo”. Aun los parlamentarios de la ultraderecha no han asumido su curul y ya amenazan con derogar la Ley Orgánica del Trabajo para los Trabajadores y Trabajadoras (discutida por el pueblo antes de aprobarla), la Ley Orgánica de las Comunas y su compendio, recortes presupuestarios a las organizaciones socioproductivas entre otras amenazas contra la estabilidad legal de la organización del pueblo, haciendo retroceder procesos históricos de reivindicación que tanto sudor y sangre han costado a la población Venezolana. A pesar de esta nueva etapa política que nos toca vivir (5 años) como pueblo, donde posiblemente estaremos enfrentado unas elecciones revocatorias para mitad de 2016, en las comunas y fábricas, la clase trabajadora sigue organizada y produciendo, combatiendo la guerra económica y creando nuevos métodos productivos, y queremos hacer un llamado al presidente Nicolas donde expresamos nuestra solidaridad y le decimos que no esta solo en esto, pero para poder emprender una férrea resistencia contra el enemigo de clases que ahora sustenta el poder legislativo de la república, es necesario una revisión profunda de los comandantes de nuestras tropas, por lo menos en el estado Lara llevamos con esta derrota, 4 en fila desde las presidenciales del 14 de abril del 2013, revisión y rectificación desde los compañeros ministros hasta el militante de base, es la única manera de lograr victorias electorales en el futuro para fortalecer la Revolución Bolivariana. En Beneagro demostramos que el único camino de superación a esta crisis es el control obrero-comunal, donde el pueblo trabajador unido hemos combatido sin descanso a la burguesía y emprendido procesos productivos que dan una respuesta inmediata y posible en el territorio, organizando la producción y distribución colectivamente sin patronesDesde las empresas recuperadas en Barquisimeto nuestra moral esta intacta, aceitando los fusiles para esta nueva etapa.  


Beneagro-Comunicaciones